¿El ejercicio ayuda con los síntomas de la fibromialgia?

Muchas personas encuentran que hacer ejercicio alivia sus síntomas de fibromialgia. En este artículo, observamos qué formas de ejercicio son más efectivas e investigamos otros tratamientos complementarios que pueden ayudar. La fibromialgia es una condición frustrante y poco conocida que causa dolor crónico. Los investigadores creen que puede deberse a una afección llamada sensibilización central, que es causada por nervios hiperactivos.

¿El ejercicio ayuda con los síntomas de la fibromialgia?
Las personas con fibromialgia generalmente experimentan dolor crónico generalizado. El ejercicio puede ayudar a prevenir el dolor crónico al fortalecer los músculos, prevenir el desgaste muscular y reducir el daño muscular. El ejercicio también puede ayudar con otros síntomas de la fibromialgia, como la depresión, la dificultad para concentrarse y los problemas para dormir. Los problemas de salud mental que a menudo ocurren junto con la fibromialgia pueden empeorar las condiciones de algunas personas. Por ejemplo, las personas que tienen depresión pueden encontrar más difícil controlar el dolor y el estrés. La investigación en personas con depresión ha encontrado que el ejercicio puede ser efectivo para aliviar algunos síntomas. Un estudio de 2016 sostiene que investigaciones previas pueden haber subestimado la efectividad del ejercicio para combatir la depresión, incluida la depresión relacionada con la fibromialgia. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan que una persona haga 150 minutos de ejercicio de intensidad media o 75 minutos de actividad de alta intensidad por semana.

Los adultos también deben realizar ejercicios de entrenamiento de fuerza dirigidos a todos los principales grupos musculares al menos 2 días por semana. Las personas con fibromialgia deben tratar de hacer la cantidad recomendada de ejercicio. Sin embargo, la fibromialgia puede dificultar el ejercicio, especialmente en personas que sufren depresión o fatiga crónica. Incluso unos pocos minutos de ejercicio a la semana es mejor que ningún ejercicio. Una persona con fibromialgia puede comenzar lentamente y aumentar gradualmente la cantidad de tiempo dedicado al ejercicio cuando encuentra un tipo de ejercicio que le resulta útil y agradable.

 

Los mejores ejercicios para los síntomas de fibromialgia.

Las personas con fibromialgia pueden intentar diferentes enfoques para encontrar la rutina de ejercicios que funcione mejor. Algunas opciones respaldadas por evidencia incluyen:

Ejercicio aeróbico
Los ejercicios aeróbicos, como correr o caminar, pueden ayudar con muchos síntomas de la fibromialgia. Una revisión de 2017 analizó estudios previos de ejercicio aeróbico para tratar la fibromialgia. La revisión encontró que el ejercicio aeróbico puede mejorar la calidad de vida, la rigidez y el dolor, y puede mejorar la función muscular. Sin embargo, no hay evidencia de que el ejercicio ayude con la fatiga. La revisión también clasifica la calidad de la evidencia como baja a moderada, ya que muchos estudios solo usan una pequeña cantidad de participantes. Las personas preocupadas por el impacto del ejercicio aeróbico en los músculos o las articulaciones deben considerar los ejercicios aeróbicos de bajo impacto, como la natación.

Ejercicio de grupo
Las clases de ejercicio pueden ayudar a las personas con fibromialgia a mantenerse motivadas. Considere comenzar con una clase de yoga, tai chi o ejercicios aeróbicos de baja intensidad. Algunos gimnasios y ofrecen clases de ejercicios específicamente para personas con fibromialgia, dolor crónico o baja movilidad. Estas clases brindan un entorno seguro para las personas que recién están comenzando con la buena forma física o que enfrentan síntomas desafiantes.

Tai Chi
Tai chi es un tipo de arte marcial chino que incorpora estiramientos y movimientos lentos. Estimula la conciencia de la mente y el cuerpo, por lo que puede ayudar con los síntomas físicos y psicológicos de la fibromialgia. Un estudio de 2018 encontró que el tai chi supervisado al estilo yang podría ser tan efectivo o más efectivo que el ejercicio aeróbico para controlar los síntomas de la fibromialgia. Los participantes en el estudio obtuvieron el mayor alivio cuando asistían a clases de tai chi con frecuencia y regularidad. Las personas que asistieron a dos clases a la semana durante 24 semanas tuvieron las mejorías más significativas en las medidas de síntomas según lo indicado por el cuestionario de impacto de fibromialgia (FIQR).

Entrenamiento de resistencia y fuerza
El entrenamiento de resistencia fortalece los músculos y puede mejorar los síntomas de la fibromialgia. Un estudio de 2015 en mujeres con fibromialgia descubrió que el entrenamiento de resistencia progresivo se asoció con una mayor salud en general, alivio del dolor y fuerza muscular. Una amplia gama de rutinas de entrenamiento de fuerza, desde clases de fuerza grupales hasta levantamiento de pesas en el hogar que puede ayudar.

Yoga
El yoga ofrece estiramientos suaves, conciencia de la mente y el cuerpo y un enfoque lento y constante para la aptitud física. Un estudio de 2017 encontró que el yoga puede ayudar con muchos síntomas de la fibromialgia, incluida la discapacidad percibida, la depresión y el miedo al movimiento. Este estudio sugiere que el yoga también puede servir como un puente hacia otras formas de ejercicio, como los aeróbicos, para las personas cuyos síntomas les impiden hacer ejercicios de mayor intensidad. El yoga también es muy accesible, con clases ofrecidas en gimnasios y centros comunitarios en la mayoría de los lugares. Muchos videos de yoga también están disponibles en internet, incluidos algunos diseñados específicamente para el dolor crónico.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ir arriba